Rafael nació el 21 de agosto de 1945 en Caguas, donde residió toda su vida y donde forjó lazos duraderos de amistad y cariño. Trabajó como asociado de mantenimiento en hospitales, labor que desempeñó con responsabilidad, dedicación y un sincero compromiso con el bienestar de los demás. Su ética de trabajo y su sencillez dejaron una huella significativa en quienes compartieron con él a lo largo de los años.
Recordado por su carácter tranquilo, su amabilidad y su disposición constante para ayudar, Rafael deja un legado de humildad, esfuerzo y profundo amor por su comunidad y su familia.
Quienes lo conocieron lo despedirán con gratitud por su vida y con la certeza de que su memoria permanecerá viva en cada historia y cada gesto de cariño que sembró.
Que descanse en paz.