Francisco Calderon Everastico

October 4, 1950 – April 26, 2025

Francisco Calderon Everastico, 74, of Palmdale, CA, passed away peacefully on April 26, 2025, surrounded by his loving family. He was born on October 4, 1950, in Santiago Temixco, Municipio de Taxco de Alarcón, Guerrero, Mexico, to Bonifacio Calderon and Maria Everastico.

A devoted husband, father, grandfather, and great-grandfather, Francisco is survived by his beloved wife, Celia Lagunas Baena; his five children: Georgina, Cesar, Ines, Roselia, and Maria; fifteen grandchildren; and eight great-grandchildren.

As a young adult, Francisco worked hard in the mines of Taxco, Guerrero, determined to provide for his growing family. Driven by love and hope for a better future, he made the courageous decision to immigrate to the United States. In doing so, he not only changed the course of his own life but that of generations to come. Through perseverance and determination, he was able to bring his entire family to the U.S., where he continued to work tirelessly—first in the peach orchards and, alongside his wife and children, gradually built a family-run produce business that became their shared livelihood.

A true pillar of strength and kindness, Francisco led by example. He was a gentle teacher to his children and grandchildren, always ready to share his wisdom—whether planting a rose bush for his wife or pointing out constellations in the night sky. Everything he did was with love and patience.

In his spare time, Francisco found joy in tending to his lawn and gardens. His green thumb and gentle spirit made everything he touched flourish. His presence was a quiet force of nature—steady, nurturing, and full of life.

Francisco’s legacy is one of love, sacrifice, and enduring devotion to family. He will be deeply missed and forever remembered.

Francisco Calderón Everástico

4 de octubre de 1950 – 26 de abril de 2025

Francisco Calderón Everástico, de 74 años, residente de Palmdale, CA, falleció pacíficamente el 26 de abril de 2025, rodeado de su querida familia. Nació el 4 de octubre de 1950 en Santiago Temixco, Municipio de Taxco de Alarcón, Guerrero, México, hijo de Bonifacio Calderón y María Everástico.

Esposo, padre, abuelo y bisabuelo devoto, Francisco deja en vida a su amada esposa, Celia Lagunas Baena; sus cinco hijos: Georgina, César, Inés, Roselia y María; quince nietos y ocho bisnietos.

De joven, Francisco trabajó arduamente en las minas de Taxco, Guerrero, decidido a brindar un mejor futuro a su creciente familia. Impulsado por el amor y la esperanza de un porvenir mejor, tomó la valiente decisión de emigrar a los Estados Unidos. Al hacerlo, no solo cambió el rumbo de su propia vida, sino también el de las generaciones que le siguieron. Con perseverancia y determinación, logró traer a toda su familia a los Estados Unidos, donde continuó trabajando incansablemente: primero en los huertos de duraznos y, junto a su esposa e hijos, fue construyendo poco a poco un negocio familiar de venta de productos agrícolas que se convirtió en el sustento de todos.

Verdadero pilar de fortaleza y bondad, Francisco predicaba con el ejemplo. Fue un maestro paciente para sus hijos y nietos, siempre dispuesto a compartir su sabiduría, ya fuera plantando un rosal para su esposa o señalando constelaciones en el cielo nocturno. Todo lo que hacía, lo hacía con amor y paciencia.

En su tiempo libre, Francisco encontraba alegría en cuidar su césped y jardines. Su mano verde y su espíritu sereno hacían florecer todo lo que tocaba. Su presencia era una fuerza tranquila de la naturaleza: constante, generosa y llena de vida.

El legado de Francisco es uno de amor, sacrificio y devoción inquebrantable a su familia. Será profundamente extrañado y recordado por siempre.