Roberto fue un hombre que amaba la vida al aire libre. Disfrutaba profundamente de pasar tiempo en su tierra natal, rodeado de la belleza natural que tanto apreciaba. La pesca y las actividades al aire libre eran algunas de sus pasiones favoritas, y en ellas encontraba paz y alegría.
Le preceden en fallecimiento su padre, Ramón Rutiaga, y su hijo, Sergio Rutiaga.
Deja tras de sí un legado de amor y recuerdos entrañables que serán atesorados por su esposa, Marisela Rutiaga; sus hijos: Jaime Rutiaga, Raúl Rutiaga y Alejandro Rutiaga; su madre, Evangelina Hernández; sus hermanas: Cristina Rutiaga y Concepción Orozco; su hermano, Sergio Rutiaga; y sus nietos: Yazmín Rutiaga, Lexey Rutiaga, Yameli Rutiaga, Raúl Rutiaga Jr. e Icela Rutiaga. También le sobreviven numerosos familiares y amigos que lo recordarán con cariño.
La familia agradece profundamente el apoyo y las muestras de afecto durante este difícil momento.
