Residente de San Juan, Puerto Rico, Manuel fue un hombre amable, amado, bondadoso, compasivo, honesto, generoso y querido por todos los que tuvieron el privilegio de conocerlo. Su vida fue un ejemplo de integridad y dedicación hacia los demás.
Recordaremos a Manuel con cariño y gratitud por el impacto positivo que dejó en nuestras vidas. Su legado de amor y bondad perdurará en el corazón de quienes lo conocieron.