María del Carmen fue una mujer amorosa y dedicada, conocida por su calidez, fortaleza y su amor por las flores, especialmente las pascuas y las orquídeas, que cuidaba con esmero y ternura. Su hogar siempre estuvo lleno de color y vida, reflejo de su espíritu generoso y alegre.
Será recordada con cariño por su familia y seres queridos, quienes la extrañarán profundamente. Su legado de amor y bondad vivirá por siempre en los corazones de quienes la conocieron.
La familia agradece las muestras de afecto y apoyo en estos momentos difíciles.