Maria Soledad Acuña, 79, a resident of Duncanville, Texas, passed away on March 27, 2024. Maria was born on July 6, 1944, in Jerez, Zacatecas, Mexico. She was the third of four siblings. Her parents were Jesús Murillo and Rebeca Salazar. Maria grew up in Jerez and spent her childhood between "La Calle de las Flores" and her father's ranch "La Labor del Marqués." Maria loved sharing her childhood stories of life on the ranch. Maria married Gabriel Acuña on June 19, 1961.
In 1980, in search of better opportunities for their children, Maria and Gabriel left their homeland and moved to North Hollywood, California. After over a decade of living in California, they relocated to Duncanville, Texas, in 1992.
Maria was a devoted wife and mother who greatly cherished her family. She always looked forward to her children coming home so she could prepare her homemade dishes. Her faith in Jesus, her love for her family, and her determined and courageous spirit will always be remembered. In addition to her family, Maria enjoyed music, gardening, and taking care of all animals, large or small, furry or feathered.
She was preceded in death by her husband Gabriel, her brothers Jesús and Carlos, and her daughter-in-law Gladys.
She leaves behind a legacy of love and kindness to her children, María Soledad, Gabriel, Jesús, Víctor Manuel, María Isabel, Fernando, Carlos, and Juan Pablo. She was also a loving grandmother to Rebecca, Khrystine, Eloy, Oscar, Gabriel, Alfredo, Mateo, Isaac, Leslie, Jennifer, Pilar, Meadow, Joshua, Victoria, Ana, Elisa, Gabriela, Juanita, and Eli. Her great-grandchildren: Tri, Hayden, Yara, Luna, Cristiano, and Santiago will deeply miss her as well. Her daughters-in-law Yara, Sarah, Blanca, and Verónica, as well as her sons-in-law Oscar and Felipe, also survive Maria, along with her sister María Guadalupe Rodarte.
María Soledad Acuña, de 79 años y residente de Duncanville, Texas, falleció el 27 de marzo de 2024. Maria nació el 6 de julio de 1944 en Jerez, Zacatecas, México. Fue la tercera de cuatro hermanos. Sus padres fueron Jesús Murillo y Rebeca Salazar. María creció en Jerez y pasó su infancia entre "La Calle de las Flores" y el rancho de su padre "La Labor del Marqués". A Maria le encantaba compartir sus historias de infancia de su vida en el rancho. María se casó con Gabriel Acuña el 19 de junio de 1961. En 1980, en busca de mejores oportunidades para sus hijos, María y Gabriel dejaron su tierra natal y se mudaron a North Hollywood, California. Después de más de una década de vivir en California, se mudaron a Duncanville, Texas, en 1992. María fue una gran esposa y madre que valoraba mucho a su familia. Siempre esperando a sus hijos para prepararles sus platillos caseros. Su fe en Jesús, su amor por su familia y su espíritu decidido y valiente siempre serán recordados. Además de su familia a María le gustaba la música, la jardinería y cuidar de todos los animales grandes, pequeños, peludos y emplumados. Le precedieron en la muerte su esposo Gabriel, sus hermanos Jesús y Carlos, y su nuera Gladys. Deja un legado de amor y bondad a sus hijos, María Soledad, Gabriel, Jesús, Víctor Manuel, María Isabel, Fernando, Carlos y Juan Pablo. También fue una abuela amorosa para Rebecca, Khrystine, Eloy, Oscar, Gabriel, Alfredo, Mateo, Isaac, Leslie, Jennifer, Pilar, Meadow, Joshua, Victoria, Ana, Elisa, Gabriela, Juanita y Eli. Sus bisnietos: Tri, Hayden, Yara, Luna, Cristiano y Santiago también la extrañarán profundamente. Sus nueras Yara, Sarah, Blanca y Verónica, así como sus yernos Oscar y Felipe, también sobreviven a María, al igual que su hermana María Guadalupe Rodarte.
SHARE OBITUARY
v.1.9.5