Los celebrantes fúnebres son expertos en personalización

¿Qué es un celebrante fúnebre?

Un celebrante fúnebre trabaja con una familia para crear una conmemoración personalizada, adaptada a la personalidad y las preferencias de un ser querido. Estos profesionales coordinan, organizan y ofician servicios.

Las personas podrían creer que un celebrante fúnebre tiene una función secular: es alguien que planifica y lleva a cabo un servicio que no es de naturaleza religiosa. Sin embargo, este no siempre es el caso. Un celebrante fúnebre puede presidir cualquier tipo de ceremonia, secular o religiosa. Incluso los funerales más tradicionales pueden incluir celebrantes para ayudar a crear elementos especiales que relaten historias únicas.

Planificar y organizar un funeral puede resultarle abrumador mientras procesa y hace el duelo por una pérdida. Aquí es donde interviene el celebrante. Junto con el director de funeral, un celebrante ofrece apoyo y orientación durante todo el proceso de planificación y ejecución de su evento, lo que alivia la carga para usted y su familia.

Ya sea un servicio tradicional más solemne, una celebración de la vida o algo intermedio, el celebrante trabajará para satisfacer sus necesidades y visión para su evento.

En la mayoría de los casos, la función de un celebrante incluye lo siguiente:

• Proporcionar guía y apoyo desde su primera reunión hasta el final de la ceremonia.
• Crear un espacio seguro y cómodo para que usted y sus seres queridos compartan sus necesidades y preferencias.
• Conocer a su familia y asegurarse de que sus deseos se cumplan.
• Diseñar una conmemoración personalizada que refleje la personalidad y los gustos de su ser querido.
• Mantenerlo informado durante todo el proceso de planificación, para que nunca se sienta excluido o abrumado.
• Preparar un mensaje que honre maravillosamente a su ser querido.
• Definir la estructura y el cronograma del servicio para garantizar que no se pase por alto ningún detalle y que no haya momentos apresurados.
• Orquestar y oficiar una ceremonia única que celebre la vida de su ser querido.

Celebrante y celebración de la vida van de la mano

En comparación con los funerales tradicionales y los servicios conmemorativos, las celebraciones de la vida suelen ser ocasiones más alegres, que destacan las pasiones e intereses de un ser querido y el impacto positivo que tuvo en sus seres queridos y en la comunidad.

Y a diferencia de la mayoría de los servicios funerarios, las celebraciones de la vida no necesariamente tienen una estructura específica ni involucran rituales específicos. El evento se puede personalizar por completo. Puede optar por pasar la música que su ser querido disfrutaba, hacer leer en voz alta algunos de sus pasajes de libros favoritos o versículos de la Biblia, servir una comida con sus alimentos favoritos, incluir una exhibición de sus artículos y fotos más preciados o reservar tiempo para que los invitados compartan sus recuerdos e historias favoritos. Los elementos que elija pueden destacar los pasatiempos, intereses, actividades profesionales o creencias de su ser querido. Un celebrante toma información sobre su ser querido y cualquier idea que usted tenga y diseña una conmemoración significativa con todo eso.

Aunque los términos celebrante y celebración de la vida pueden parecer sinónimos, las familias muy tradicionales también contratan celebrantes. Un pastor, sacerdote u oficiante funerario puede llevar a cabo el servicio funerario, mientras que el celebrante ayuda a la familia a incorporar detalles personales en otros aspectos de la conmemoración. En algunas situaciones, es posible que un pastor o sacerdote no esté involucrado, y el celebrante supervisará algunos aspectos del servicio, como las lecturas, o dirigirá a amigos y familiares para que canten una canción o himno favorito.

¿Es lo mismo un celebrante que un oficiantes o un director de funeral?

Aunque los celebrantes, los oficiantes y los directores de funeral pueden compartir algunas tareas, desempeñan funciones distintas y separadas.

La función versátil de un celebrante comprende ser un narrador, líder de servicio, oficiante, guía, productor, escritor, pasadiscos, orador, presentador y maestro de ceremonias.

Cualquier persona que oficia un servicio puede llamarse oficiante, incluidos los líderes espirituales o religiosos, como pastores y rabinos. La función de un oficiante puede comprender algunos o todos los mismos elementos que los de un celebrante.

Un director de funeral está capacitado profesionalmente para brindar apoyo a una familia que ha perdido a un ser querido y coordina todos los aspectos del proceso de entierro o cremación, lo que incluye la solicitud de un certificado de defunción y la obtención de permisos. También ayuda a la familia a planificar una vigilia, si lo desea, así como el funeral, la conmemoración o la celebración de la vida.

¿Por qué contratar a un celebrante fúnebre?

En general, los servicios planificados por un celebrante fúnebre difieren de los servicios tradicionales. Si bien muchos servicios tradicionales se enfocan en costumbres y tradiciones religiosas, los celebrantes fúnebres se enfocan en la persona homenajeada. Un celebrante fúnebre puede ayudarle a atravesar una situación emotiva y poco familiar, y a crear una ceremonia que conmemora a su ser querido de una manera que le parezca adecuada a su familia.

Considere contratar a un celebrante en las siguientes situaciones:

• Necesita ayuda para personalizar un servicio funerario y no está seguro de cómo hacerlo.
• Quiere a alguien que pueda guiar a familiares y amigos a lo largo del servicio.
• Está buscando a alguien para que actúe como oficiante y orador principal en una conmemoración.
• Está buscando maneras de que los invitados participen y homenajeen a su ser querido.

Un celebrante fúnebre se reunirá con usted y su familia para ayudar a planificar un evento muy personal. Este enfoque enfatiza los detalles que hicieron que alguien fuera especial. Un celebrante puede pedirle que comparta sus recuerdos favoritos de su papá o historias divertidas sobre su mamá. Se tomará el tiempo para conocer lo que su ser querido valoraba y lo que otros valoraban de él o ella.

Un celebrante fúnebre puede sugerir formas significativas de mostrar los intereses de su ser querido. Por ejemplo, si su padre era un mecánico que eligió un entierro en cementerio, un celebrante podría sugerir que exhiba sus herramientas gastadas en el servicio y que algunos asistentes las coloquen dentro de su ataúd. Si su tía era una ambientalista que optó por el compostaje humano, el celebrante podría sugerir a los invitados que se lleven a casa frascos de vidrio llenos de tierra para esparcirla en sus jardines.

Independientemente de los detalles, el celebrante le alentará a asumir un papel activo en la creación de la historia de su ser querido. Incluso antes del servicio, las conversaciones y reflexiones facilitadas por el celebrante pueden ser una parte importante del proceso de curación. La pérdida de un ser querido puede provocar una tristeza inevitable, pero simplemente tener la oportunidad de hablar y recordarlo con alguien puede hacer que esa travesía emocional sea un poco más fácil. Sus conversaciones también revelan información importante sobre la vida de su ser querido, que puede influir sobre el evento de maneras grandes y pequeñas.

Celebrar cada vida como ninguna otra

Los planificadores de Dignity Memorial^® entienden que no hay dos vidas iguales, y un servicio funerario debería reflejar eso. Nuestros celebrantes y oficiantes le ayudan a crear servicios significativos y memorables que reflejen las creencias y pasiones de su ser querido y su familia.

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