

He vivido una gran vida. Nací en Versalles, Matanzas, Cuba el 18 de octubre de 1939. Mis abuelos eran españoles y vinieron a Cuba cuando eran jóvenes. Mis padres eran Domingo Germán Cabrera y Maria Teresa Gonzalez. Asistí a la escuela de La Virgen Milagrosa de kinder a octavo grado. Después de graduarme de la escuela La Virgen Milagrosa asistí a la escuela Normal para Maestras. De la escuela Normal para maestras me gradué a los diecisiete años y empecé a trabajar como maestra de primaria. Mi primer aula fue en una escuela rural, donde tenía que tomar el tren y después montar a caballo hasta la escuela. Enseñaba a alumnos de primer grado hasta sesto grado. Mi próxima aula que me asignaron fue en la ciudad en la escuela Goicuria. En esta escuela ensene a alumnos de primer grado hasta que nos dieron la visa para los Estados Unidos. Cuando recibimos la visa para irnos a los Estados Unidos me despidieron de mi trabajo. Entonces mi esposo y yo hacíamos panetelas para vender para sobrevivir hasta que nos dieran la salida.
Conocí a mi esposo, Nelson Casanova Luis cuando tenía catorce años y él tenía quince años. Fuimos novios por seis años. Nos casamos el 8 de julio de 1961. Tuvimos solo una hija, Beatriz Maria Casanova Cabrera que nació el 2 de mayo de 1962.
En octubre de 1967 al fin recibimos la salida de Cuba a los Estados Unidos. Salimos de Varadero, Cuba el 18 de octubre de 1967 bajo el programa del Presidente Lyndon Johnson, Vuelos de Libertad, como refugiados. Ese día era mi cumpleaños y fue el mejor regalo que podría recibir, liberada del comunismo para mi familia y para mi. Volamos a Miami, Florida, nuestro puerto de entrada a los Estados Unidos en un avión de Pan Am. Al llegar a Miami nos llevaron a la casa de la libertada donde estuvimos hospedados por tres días. A los tres días mi esposo, mi hija, mi mama, y yo volamos a California donde vivían la familia de mi esposo y donde empezaría nuestra nueva vida.
Mis momentos más importantes de mi vida fueron hacerme maestra de primaria, casarme con mi
esposo, Nelson Casanova, tener a mi hija, Beatriz Maria Casanova, y poder salir del comunismo viniendo a los Estados Unidos y ser libre.
Para todos los que me conocían, mi familia y mis amistades, quisiera que me recuerden como una persona alegre, que siempre estaba lista para bailar, cantar, decir chistes y siempre lista para una fiesta. Acuerdense que esto no es un adiós sino un hasta luego porque yo los estaré esperando en el cielo.
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I have lived a great life. I was born in Versalles, Matanzas, Cuba on October 18, 1939. My grandparents were Spaniards and came to Cuba in their youth. My penable ts were Domingo German Cabrera and Maria Teresa Gonzalez. I attended La Virgen Milagrosa School from kinder to eighth grade. After graduating from La Virgen Milagrosa School, I attended La Normal School for Teachers. I graduated from La Normal School for Teachers at seventeen and I started working as a primary school teacher. My first class was in a rural school where I had to take a train and then ride a horse to the school. I taught students from first grade to sixth grade. My next class was in the city at the Goicuria School. At this school I taught first grade until we received our visa to the United States. When I received the visa to the United States I was dismissed from my job. Then my husband and I made cakes to sell to make a living until we received the flight date.
I met my husband, Nelson Casanova when I was fourteen years old and he was fifteen years old. We dated for six years. We were married on July 8, 1961. We had only one child, Beatriz Maria Casanova Cabrera, who was born on May 2, 1962.
In October of 1967 we finally received the flight to leave for the United States. We left via Varadero, Cuba on October 18, 1967 under President Lyndon Johnson’s Freedom Flights as refugees. That day was my birthday and it was the best present I could have received, liberty from communism for my family and me. We flew to Miami, Florida, our port of entry into the United States, on a Pan Am airplane. On arrival in Miami we were taken to Liberty House where we were hosted for three days. After the third day my husband, my daughter, my mom and I flew to California where my husband’s family lived and where our new life would begin.
My most important moments in my life were becoming a primary school teacher, getting married to my husband, Nelson Casanova, having my daughter, Beatriz Maria Casanova, and being to leave communism by going to the United States and being free.
For all of those who knew me, my family and friends, I would like you to remember me as a happy person that was always ready to dance, sing, tell jokes, and always ready for a party. Remember this is not goodbye but see you later because I will be waiting for you in heaven.
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v.1.18.0